Si bien, el Dormir lo suficiente es esencial para ayudar a mantener una salud y un bienestar óptimos, cuando se trata de dormir mientras las cosas van sucediendo a nuestro derredor, puede ser fatal. Dormir al volante, por ejemplo. Así también para el creyente. Estar dormidos es no darse cuenta de lo que está sucediendo frente a nosotros, es vivir en tinieblas e ignorando las palabras de Jesús. En 1 Pedro 4:7 dice lo siguiente:
El llamado a despertar en este pasaje es para que estemos alertas, porque los tiempos que vivimos son peligrosos y, a la vez, son un anuncio de que el día de nuestra salvación se acerca. Dios quiere que despertemos del sueño y empecemos a vivir conforme a las escrituras. Por lo que, debe haber una diferencia entre nosotros los hijos de Dios y los que viven para agradar al mundo. Porque si no hay ninguna diferencia y nos parecemos a ellos, entonces estamos perdidos. Es hora de despertar y vivir como hijos de luz.
El tiempo pasa y nadie lo detiene, todas las personas tenemos la misma cantidad de minutos para disponerlos de la mejor manera, pero depende de nosotros cómo los usamos. La Biblia dice que en los últimos tiempos la situación en la tierra no será agradable. Por eso, la Palabra de Dios nos anima a estar alertas, orando, con la mente despejada. Y esto, conociendo los tiempos, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. Concentrarse en buscar el reino de Dios y su justicia, hará que nos enfoquemos en aquello importante, relevante y que nos prepara para lo eterno.