Hace evidente el amor de Dios:
¿Con qué frecuencia les dice a sus hijos “Te quiero”? Tal vez fue esta mañana, mientras se despedía al marcharse de casa. Sea como sea que haya sucedido, usted sabe que estas palabras no son la única evidencia de su amor. Los niños entienden del amor cuando el dicho es acompañado por la acción; mientras los ayuda en las áreas en donde están luchando o necesitan ser confortados, o en su capacidad para ofrecerles el tiempo que anhelan tener con usted. Conocemos el amor a través de las acciones. El Rey del universo nos ama, y lo demostró en la Cruz.
Prueba el perdón:
Probablemente sus hijos entiendan algunos principios económicos. Cuando van de compras, deben pagar por ellas; y cuando pagan, obtienen un recibo. Este recibo comprueba que ya han pagado. Si en algún momento hay duda de la compra del producto, el recibo es la prueba del pago. De acuerdo con la Biblia, la resurrección de Cristo sirve como “recibo” de Dios para probar que nuestros pecados ya han sido perdonados. De hecho, emitir un recibo fue idea de Dios. La resurrección es la prueba de Dios que demuestra que el sacrificio de Cristo fue suficiente para pagar nuestros pecados.
Restaura nuestra relación con Dios:
Usualmente terminamos nuestras oraciones con la frase “en el nombre de Jesús”. Es fácil que se convierta en una muletilla o un pequeño slogan al final de la oración. Pero puede ser una buena oportunidad para enseñarle a los niños que la muerte y resurrección de Cristo nos permite una relación con Dios. Deje que sus hijos imaginen una sala de justicia, con Satanás ante Dios, exponiendo nuestros pecados como evidencia en contra nuestra. Ahora imagine a Jesús, acercándose: “Padre, objeción. Yo ya he pagado por estas transgresiones en la Cruz. El acusado es alguien que ya ha sido redimido y restaurado”. Así podemos enseñar de manera práctica y vivencial acerca de la acción redentora de Jesús a nuestros hijos.
Es una victoria para el futuro:
El único poder que tiene Satanás es aquél que permitimos que tenga. Él sabe que ha sido derrotado en la Cruz y que está la tumba vacía de Cristo. Esta semana puede ser la ocasión especial para ayudar a sus hijos a entender que el enemigo necesita nuestra cooperación para atacarnos. Alguna vez escuché una Ilustración: Hubo un incendio en una pradera mientras un padre junto a su hijo allí estaba en una carreta. Cuando el fuego estaba a punto de consumirlos, el padre tomó el caballo y fue a un lugar que ya había sido quemado. Le dijo a su hijo que saltara de la carreta y se quedara quieto. El hijo respondió: “¡Pero el fuego nos rodea!” El padre le explicó: “Esta parte ya ha sido quemada. El fuego no volverá aquí”. Esta es una buena imagen para ayudar a los niños a comprender la victoria que Jesús nos da sobre el pecado.